El eterno debate acerca de la caza y lo que debemos entender por caza, entra en conflicto frontal con las nuevas técnicas de crianza y generación de animales. Los populares cercones (de guarros, venados,...) envilecen nuestra afición acercando metas cinegéticas(en cantidad y calidad) hasta hace pocos años absolutamente impensables.
Siempre he entendido que cada cuestión tiene su mérito y es el aficionado quien lo debe tener claro depurarando el “sabor” que debe extraer a cada modalidad (nunca puede ser lo mismo matar un venado “de montería” en una finca abierta saliéndose de la mancha a primera hora de la mañana, que cobrar cuatro o cinco reses en una "malla" que además puntuarán de forma excepcional; el nivel de cada cazador lo marca precisamente la sensibilidad para determinar la diferencia). Como digo, no pretendo criticar a nadie puesto que cada lance tiene que tener su encanto.
Sentado lo anterior, lo que está claro es el innegable mérito de dichas explotaciones (llamémosles de semilibertad) y cuyos resultados me impresionan año tras año. Os cuelgo tres videos que ejemplifican lo comentado que aunque tratan sobre ejemplares de fuera de nuestro pais, no dejan impasible a cualquier aficionado.
Solo pensar en ejemplares de 480 ó 513 puntos CIC, aunque sean de Nueva Zelanda, parece mentira ...
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